El Perro y el Gato
En una ocasión dijo el gato al perro:
-Miras mis uñas son tan filosas que puedo cortar la carne sin problema, mis dientes son tan fino y pulsantes que podría destrozar el cuero con facilidad y con mi olfato puedo detectar cualquier animal a cien metros a la redonda; ¡oh! Espera, se me quedaba lo de mi agilidad… no importa cómo me tiren para arriba siempre caigo parado. Con razón los humanos dicen que el gato tiene siete vidas. Me gusta tanto eso que tengo que subir el espinazo y los pelos frente a cualquier amenaza que atiente contra mí.
El perro se queda mirando al gato después de escuchar tanta autoalabanza y deja salir de hocico en tono humilde:
- Amo mi Amo, él me da de comer, me baña, me lleva a cualquier lugar que va, acaricia me cabeza y por momento me abraza, cuando hay peligro está pendiente; sea de frio o amenaza de muerte yo soy tan importante para él, que sin mi amo no puedo vivir. Lo necito todo el tiempo conmigo, en definitiva, siento que es la razón de mi existencia. No sé por qué escucho al que alegra mi corazón y beso por doquier decir que el perro es el mejor amigo el hombre.
El gato, luego de un estruendoso maullido, expresa:
-¡Miaaaaaooooo…! es el hombre que no puede vivir sin mí.
Moraleja:
El grandes no habla de él. Habla de quienes lo hacen grande.
Enrique Martínez Taveras
09-02-2014
No hay comentarios:
Publicar un comentario